Moda flamenca: Más allá del flamenco como arte y cultura, un estilo de vida

Existe un movimiento global enmarcado en enaltecer la escena cultural en las escuelas y España no escapa del hecho, exaltando acciones que buscan el desarrollo de las artes en el currículo escolar y muy en particular todo lo relacionado con la música y el flamenco, como representación propia de la cultura andaluza y del sentir español. El traje de flamenca se ha constituido en ese elemento inspirador que busca mantener siempre en alto la imagen de Andalucía y se ha transformado en elemento de estudios antropológicos, resaltando las relaciones ideológicas, de la “identidad colectiva” y la representación que el mismo otorga al hecho cultural.

La moda flamenca se resalta en el uso de volantes, telas con arreglos florales o lunares, mangas con vuelos, flecos, collares extravagantes, pendientes llamativos, mantones, tocados de flores, peinetas grandes y sobre todo color, mucho color. Al igual que la vestimenta convencional la moda flamenca ha ido evolucionando para incorporar transparencias en sus arreglos, minimizando los volantes, acortando el largo de las faldas, elaborando diseños minimalistas o unicolores, eliminando las mangas e incorporando tirantes en los vestidos, lazos, adaptándose así a las diversas temporadas del año sin perder la originalidad y prestancia característica en los trajes de flamenca. Hoy podemos ver el desfile de cientos de personas en todas las ferias regionales, ataviadas con la usanza flamenca, listas para la fiesta.

Los trajes de flamenca han llegado a personalizarse, incorporando detalles propios que enaltecen el diseño y favorecen el proceso de masificación de las piezas, pudiendo llegar a ver un desfile sin que se repita uno sólo de los detalles que conforman el conjunto. Por esto y mucho más, hay moda flamenca para rato.

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